“La industria de la carne gasta mucha agua, genera mucho metano y dióxido de carbono e incrementa el efecto invernadero”, precisa Yosselin Castro, voluntaria y chef del lugar. Ella agrega que también es mala para la salud, por lo que su movimiento busca brindar una alimentación saludable.
A diario, ella y otras voluntarias preparan platillos donde predomina el color verde en la comida rápida para los comensales.
“No comer carne genera grandes beneficios a la salud, como bajar el colesterol, reduce el riesgo de padecer enfermedades del corazón, diabetes, hipertensión y cáncer”, explica Danitza Arandia, otra de las gestoras del proyecto.
La proteína animal de la carne, que necesita el cuerpo para su correcto funcionamiento, es sustituida por proteínas vegetales. “Nos libramos de las toxinas que acompañan la carne, entre ellas metales pesados, hormonas, antibióticos y plaguicidas que consumen los animales”, detalla Castro. Los almuerzos tienen un costo de Bs 15 y las hamburguesas Bs 5. Con las ganancias, el grupo sustenta las actividades del centro.
“Todos los martes a las 19.30 se realiza el encuentro Carnívoros Anónimos, que está abierto a todos, donde enseñamos a cocinar comida vegetariana y una vez al mes hacemos una velada consciente para una buena alimentación”, invita Arandia.
Preparado
Para hacer hamburguesa dejar las lentejas en remojo, un par de horas, a fin de que se ablanden. Luego de amasarlas, formar las hamburguesas.
Fuente: Revolución de la Cuchara Bolivia (2420775 y 707-62277), Comedor Laskmi (Aspiazu y Jacinto Benavente 612).amburguesas que ofrecen son de lenteja, hechas de forma artesanal, sin conservantes. Los universitarios son los que más las consumen.
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