Ubicado en la esquina de las Avenidas Salamanca y Antezana, este delicioso rincón ofrece variedad de sándwiches, cafés, tés, jugos, masitas y chocolates.
Originalmente creado en La Paz por Rodrigo Astorga, Café Vainilla abrió su primera sucursal en Cochabamba, con un concepto basado en una mezcla de café europeo con los afamados cafés Starbucks.
Los ambientes de Vainilla son acogedores y distintos, ofreciendo a sus visitantes momentos de bienestar y tranquilidad, disfrutando variedad de sabores.
El comensal encuentra en éste, un espacio apropiado para charlar amenamente, siendo bien atendido por el personal.
La carta de Vainilla cuenta con aproximadamente 140 ítems, además de exquisitos desayunos, dice Carlos Zelada, propietario del café, quien asegura que los productos que ofrecen son distintos a todo lo que hay en la ciudad.
Las recetas son propiedad del dueño de la franquicia, que tiene más de 20 años de experiencia en cafetería. El menú es variado y tiene desde las famosas facturas y media lunas típicas argentinas, hasta empanadas de queso, de receta boliviana. Los sándwiches son bien americanos y gran parte de la repostería es europea.
Asimismo, si bien el café es boliviano, recibe un tratamiento en el proceso del tostado, que le otorga un sabor más europeo.
Entre la variedad de cafés que ofrece están el expreso, el capuchino y el vainilla caramelo macchiato. En los sándwiches, uno de los más requeridos es el de lomito y en repostería, la distinta variedad de cheesecakes, tortas y facturas.
DE LA DECORACIÓN
La decoración y ambientación es similar al de La Paz; el mural se lo ha modificado, dándole un toque cochabambino relacionado al Cristo de la Concordia, emblema de la ciudad.
La intención del propietario, dado el éxito de este emprendimiento, es abrir nuevas sucursales en la ciudad, por lo menos una más hasta el próximo año.
No hay comentarios:
Publicar un comentario