Brasserie. Cada noche ofrece comida de alto nivel en un ambiente descontraído.

Todo lo que el chef Gerard Germain toca no se convierte en oro, pero sí en algo delicioso que bien podría valer como el preciado metal. Bajo el concepto de brasserie, este experto de la cocina y el empresario gastronómico Leonardo Weise crearon el restaurante Gerard Germain, un lugar acogedor, que ofrece comida de primer nivel a un público más descontraído.

Aunque intentaron ser prácticos y austeros con el menú, ninguno de sus 84 platos lo consigue, porque algo que puede parecer simple como el cebiche mixto, en Gerard Germain se convierte en una copa de martini en la que encontrarás además del cebiche, crema de leche, trozos de frutas frescas, decorado con fideo frito y chiffonade de cáscara de naranja y de perejil.

Más consistente puede resultar el ojo de bife, 350 gr. de carne, que en el local se sirve con tres guarniciones y tres salsas, es decir que vos elegís qué sabor le darás a cada bocado que te llevés a la boca. Y el tiernísimo bistec lleva encima un pedazo de tuétano.

Picadas, entradas frías y calientes, ensaladas, sopas, pastas y risotos, mariscos, pescados, carnes, aves, vegetariano, postres, el rincón asiático y 140 variedades de vinos completan su carta