Para este nuevo emprendimiento se crea la sociedad denominada “Binomio S.R.L. ” la cual tiene como objetivo la expansión de la marca “Muela del Diablo” en otros espacios y demás aeropuertos de nuestro país.
“La idea surge porque soy amigo de Lenin hace tiempo y me contó sobre este proyecto. Vimos que la Muela del Diablo se adaptó muy bien en la ciudad y nos pareció una estupenda idea crear una sociedad para traer la Muela del Diablo al aeropuerto para que los viajeros tengan la opción de comer bien antes y después de cualquier vuelo”, cuenta Álvaro Requena, socio Binomio.
HISTORIA Y MENÚ
“Muela del diablo” bar nace hace 8 años en la ciudad y después de cuatro años creamos un espacio gastronómico gourmet denominado por la misma clientela “La Muelita”, con pizzas artesanales como principal oferta. Una pizza con las costumbres Italianas que Gabriela aprendió cuando estudió y trabajó en Italia”, cuenta Lenin Butrón, propietario de Muela del diablo.
“Comenzamos con las pizzas, luego pasamos a las pastas, bruschettas y demás platos con ingredientes que de repente no eran muy utilizados en Cochabamba, como por ejemplo los tomates cherry, la rúcula, el jamón serrano y los hongos siempre frescos, jamás de lata. Empezamos con esa idea de tener productos alternativos, conocidos seguramente en otros países, pero en el nuestro no tanto. Es así como La Muelita marca diferencia con su comida. Ahora hemos traído al aeropuerto nuestras pizzas, obviamente nuestro horno no es a leña por regulaciones y normas de los aeropuertos, pero hemos conseguido la manera de hacerlas a la piedra y no cambia la esencia que son los productos de primera calidad en lo que no hemos variado absolutamente en nada”, asegura Gabriela Cordova, jefe de cocina y propietaria “Muela del diablo”.
“Tenemos deliciosas opciones de gastronomía y café. Somos muy exigentes con la calidad del producto que ofrecemos, queremos que sea único por lo que hacemos nuestra propia mezcla con dos tipos de cafés orgánicos nacionales de altura. Por otro lado, trabajamos muy bien en el tema de la presentación en cada plato o café que ofrecemos, siempre manteniendo los detalles y los estándares de calidad de la Muela del Diablo. Trabajamos con productos orgánicos y huertas que nos proporcionen siempre productos frescos”, comenta Lenin.
“La única variación que hemos hecho es adecuar algunas porciones para los viajeros; por ejemplo, se ha creado una pizza que viene en tamaño personal y una pizza junior, precisamente para ese viajero que está solo y quiere comer una pizza sin tener que desperdiciar el resto”, dice Requena.
La Muela del Diablo en el aeropuerto abre las 24 horas del día. La calidad de sus productos y el tiempo en que son entregados hacen la diferencia. Ofrece variedad de pizzas y sándwiches gourmet diferentes como: roast beef, pollo provenzal, cerdo barbacoa y obviamente las deliciosas tortas y postres para el más exigente paladar.
“En la mañana lo que recomiendo es un cinnamon roll con un cappuccino, o un desayuno americano; para medio día la pizza y la cerveza alemana son la combinación perfecta”, dice Lenin Butrón.
“También están los sándwiches y ensaladas, que la gente pide mucho. Un factor importante que tomamos en cuenta es el tiempo; como el viajero a veces apenas tiene 20 minutos para entrar a pre embarque, hacemos todo lo posible para satisfacer a los clientes”, indica Requena.
Entre los planes a futuro de los socios de este emprendimiento que seguro agradecerán los viajeros, está abrir La Muela del Diablo en otros aeropuertos de Bolivia una vez que esté consolidado el del aeropuerto de Cochabamba.
LA DECORACIÓN Y AMBIENTACIÓN
En cuanto a la ambientación, la idea de crear un espacio único surgió de los socios, tomando como referentes cafeterías de aeropuertos europeos, por lo que lograron un lugar cómodo para las personas, manteniendo el concepto de La Muela del Diablo en la ciudad.
“Quisimos mostrar un ambiente lindo, limpio y abierto, con una buena distribución de mesas para que nuestros clientes se sientan cómodos y bien atendidos. Fuera del restaurante tenemos tres pantallas que muestran los platos que ofrecemos en fotografía profesional.”, dice Requena.
Un espacio único en el aeropuerto, donde el viajero sentirá que empieza muy a gusto su viaje.
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