Fuente: Opinion
“La Quinta Moreira” es el vivo ejemplo de cómo una familia y su negocio puede evolucionar con los años para adaptarse a las exigencias de los comensales y convertirse en un lugar con tradición.
Hace 75 años, los esposos Manuel Cruz Moreira y Bernardina Rodríguez Torrico dejaron la Llajta para abrir un restaurante en el departamento de Oruro.
El restaurante se hizo muy popular, pero por la enfermedad de una de sus hijas tuvieron que regresar a Cochabamba, donde la segunda generación de los Moreira se hizo cargo de mantener viva la tradición .
Sabrina Moreira (la hija mayor) y su esposo Octavio Prieto se instalaron en Cochabamba para dar vida a la “Quinta Moreira”, un lugar que desde 1980 se volvió conocido como “ la embajada de Oruro en Cochabamba”.
Hoy Gladis Prieto Moreira junto a sus hermanos y su esposo Gonzalo Tames son la tercera generación que está al frente de este negocio familiar .
Gladis confiesa que los residentes orureños (y la barra del San José) siempre llegan al restaurante nostálgicos del sabor de un buen cordero y de la Virgen del Socavón que existe en el lugar y a quién le elevan oraciones.
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