Cada vez hay más boliches ‘libres de humo’ en Bolivia

Que a la mañana siguiente tu ropa apeste a cigarro, que te duela la cabeza, la garganta y te ardan los ojos parece ser el precio que hay que pagar por salir a bolichear en cualquier lugar de Bolivia, incluso si uno no fuma. Por suerte, comienzan a aparecer locales 100% libres de humo donde divertirse sin dañar la propia salud ni la del prójimo.

Más allá de lo que digan las leyes (y de que se cumpla lo que dicen) cada vez hay más espacios de entretenimiento que, de forma espontánea, prohíben que sus clientes fumen y la gente se va ‘haciendo la idea’ de que para prender un cigarro tiene que salir a la calle.

Uno de los lugares que está siguiendo esta tendencia global en Santa Cruz es Meraki Teatro Bar, que nació hace 10 meses siendo un local libre de humo y hasta ahora no ha tenido problemas con ello. Si bien en una obra de teatro es normal que no se fume, en un concierto puede resultar difícil imponer ese tipo de regla a los fans. Uno de los propietarios, Pato Peters, dice que “salvo uno que otro saca su cigarro pero inmediatamente lo apaga o sale a la calle, o a un patio que tenemos atrás”.

Como Meraki en Santa Cruz hay varios en La Paz, por ejemplo el bar de vinos Hallwritght’s, el boliche Magick, el Teatro NUNA o el Centro de Eventos Mediterráneo, además de algunos hoteles y restaurantes. También en Sucre y en Tarija hay locales que se suman a esta tendencia, según una página en Facebook que promueve respirar sano.

La tendencia libre de humo surge de a poco y de diferentes formas: están los boliches que prohíben totalmente fumar, algunos que son menos tajantes y tienen terrazas o patios donde los clientes pueden hacerlo y otros van tanteando mientras toman la decisión y organizan una noche de aire puro a la semana.

Movimiento en redes
“Leí cómo se estimulaba el vicio y el daño que realmente hace en todo el organismo, así que dije ‘hay que mostrar a la gente esta información’, así comenzó todo”, dice Xavier Iturralde, impulsor del movimiento “Bolivia respira sana”, que en Facebook tiene cerca de 30.000 seguidores.

Con la intención de estimular la creación de ambientes libres de humo, la campaña difunde cuáles son estos lugares, algunos vetaban a los fumadores desde antes y otros empezaron a hacerlo cuando conocieron este movimiento.

“El objetivo es mostrar las alternativas para la gente que desea cuidar su salud y que los otros boliches vean que su negocio puede ser rentable siendo libre de humo”, explica.

Si bien hay quienes critican –argumentan, por ejemplo, que es un acto de discriminación o que hace frío para fumar al aire libre (en La Paz)- la mayoría de la gente lo toma bien, sobre todo los artistas que actúan en boliches y a veces pagan con su voz el vicio de su público.

Vero Pérez, vocalista de Efecto Mandarina, es una de las defensoras del movimiento y hasta lanzó una campaña que está por convertirse en un proyecto de ley. Todo comenzó después de una tocada cuando se despertó y además de que todo olía a ‘pucho’, tenía dolor de cabeza y de garganta. “Dije no puede ser que seamos el único país de la región donde se puede fumar en lugares cerrados”, relata, luego filmó un video explicando su postura, lo subió a las redes sociales donde tiene miles de seguidores y, aunque al principio la criticaron, ahora ve que la gente lo entiende y ha logrado que no se fume en sus presentaciones.

“Es un tema de respeto al prójimo, es como botar basura en la calle: no solo te afecta a ti sino a las otras persona también”, explica.

Puntos de acción

El asunto tiene varias aristas más allá de la salud y las buenas costumbres. Por ejemplo en lo legal, en Bolivia hay normas que prohíben fumar en lugares cerrados pero existen vacíos legales para su cumplimiento y no hay sanciones para los fumadores.

En lo económico, muchos locales reciben auspicios de las tabacaleras, lo que dificulta –pero no imposibilita- que se sumen a la tendencia de eliminar el cigarro en sus ambientes.


Análisis

“El vapor de los cigarrillos electrónicos también daña”

Alejandro Videla
Médico especialista en Neumología del Hospital Universitario Austral (Buenos Aires)

Los fumadores pasivos tienen riesgo de padecer cáncer, según la intensidad de exposción al humo del tabaco. Los estudios dicen que una exposición por 25 años o más duplica el riesgo de adquirir cáncer de pulmón y se estima que el 17% de casos en no fumadores es atribuible a exposición elevada al humo del tabaco.

Todo cigarrillo es malo para la salud, sin importar si es de baja cantidad de nicotina, con o sin filtro, saborizado o no. El mismo humo de tabaco contiene sustancias tóxicas que favorecen el desarrollo de diferentes tipos de cáncer (lengua, laringe, esófago, estómago, pulmón, etc).

En el caso de los cigarrillos electrónicos, el daño a la salud es menor pero también es perjudicial incluso en los fumadores pasivos. El vapor aumenta la concentración de nicotina en el ambiente y produce otras sustancias nocivas como formaldehido, acroleina y diacetilo.