Tu comida preferida a un clic de distancia. Ésa es la propuesta de Acomer, el primer patio virtual de comidas en Bolivia, que ofrece un recorrido gastronómico por 20 restaurantes de Santa Cruz, mediante un sistema innovador que permite hacer pedidos por internet.
El portal web www.acomer.com.bo es un servicio práctico y novedoso que funciona como canalizador de solicitudes y abre paso a una nueva herramienta tecnológica que reemplaza el teléfono e invita a navegar por menús interactivos, como nunca antes se vio en el país.
Desayunos nacionales e internacionales, sándwiches, comida francesa, italiana, japonesa, mexicana, ensaladas, panadería fina, café, postres, carnes a la parrilla y hasta piqueos de quesos y fiambres conforman la vasta oferta de este emprendimiento.
“Los usuarios que acceden a este servicio pueden obtener una variedad enorme de menús y los restaurantes se benefician de gran manera al poder ofrecer sus productos por internet. Somos un nuevo canal de ventas, una plataforma de apoyo y gestión de sus pedidos”, dice Walter Méndez, fundador y director de la empresa Acomer.
Después de un año de arduo trabajo, tiempo en que se creó el sistema, se diseñó la página y se captó seguidores, los primeros pedidos se efectuaron en noviembre de 2012.
Y aunque por el momento el servicio se limita a la ciudad de Santa Cruz, este año quieren replicar la experiencia en Cochabamba, La Paz y, de haber aceptación, en Sucre y Tarija.
El propietario del restaurante colombiano Tutuma Wings, Juan David Plata, explica que se unieron a esta red para expandir sus servicios por internet y así llegar a nuevos clientes. “Nuestras expectativas son altas al participar en este patio de comidas, porque creemos que la web genera mucho movimiento y es una nueva manera de dar a conocer lo que ofrecemos”, agrega.
Desde la web
A diferencia de hacer un pedido por teléfono, cuando uno ingresa al portal web de Acomer tiene acceso al menú completo, como si estuviera con la carta o menú en sus manos.
Además, las empresas tienen la opción de presentar sus ofertas y descuentos, por categorías y con breves explicaciones de lo que contiene cada platillo.
Hacer el pedido consta de cuatro pasos. En primer lugar, el cliente debe localizar su dirección en el buscador de calles; en segundo, debe elegir el restaurante de su preferencia; después debe seleccionar lo que quiera del menú y, finalmente, confirmar la solicitud.
El restaurante recibirá la orden de forma inmediata, procederá a prepararla y enviarla a la dirección señalada. El pago se hace una vez que el cliente recibe su pedido, sea en su domicilio o en el local, pero también se trabaja para, en un futuro, dar la opción de pagar con PayPal -un sistema de pago en línea- y con tarjeta de crédito.
“Es un servicio práctico y directo al consumidor. En el menú interactivo pueden encontrar fácilmente lo que están buscando, viendo todas las opciones que ofrecemos”, comenta Carla Tavera, propietaria de Ego Café.
Fuera de la página web, Acomer tiene una cuenta en Facebook, en la cual promociona activamente las ofertas de los restaurantes afiliados y capta nuevos clientes. A la fecha tiene más de 2.100 seguidores.
Para Eduardo Rojas, presidente de la Fundación Redes, el comercio electrónico es una tendencia inminente del desarrollo económico en todos los países, porque “dinamiza las economías y fomenta la competencia y transparencia sobre precios, no sólo para usuarios/consumidores, sino también para empresas y proveedores de servicios”.
De acuerdo con la Federación Latinoamericana y del Caribe para Internet y el Comercio Electrónico, “la banda ancha permite a las pequeñas y medianas empresas encontrar clientes nuevos en todo el mundo, y ayuda a la gente a encontrar información, productos y servicios más variados”.
No obstante, al tratarse de un servicio que aún da sus primeros pasos en el país, la mayor dificultad para la empresa fue encontrar fuentes de financiamiento en organismos privados que apoyen este tipo de iniciativas.
“Muchos se olvidan que materia prima no es sólo lo que produce o se extrae de la tierra; materia prima son los jóvenes que con su ingenio e innovación están cambiando la manera de comprar o vender, la forma de explorar o ver las cosas; son muy pocos los que saben y se atreven a aprovechar esta materia prima inagotable”, dice Méndez.
Este emprendedor persevera en su misión de revolucionar la forma de hacer negocios, para llegar a más empresarios y usuarios que creen que el comercio electrónico tiene muchas más opciones que ofrecer.
Punto de vista
eduardo rojasPresidente Fundación RedesEn estas iniciativas de comercio electrónico es recomendable promover la construcción de sitios web ligeros, que no tarden mucho en descargar la información, considerando la baja calidad del servicio de internet en el país.Es imprescindible pensar en tecnologías móviles y considerar aspectos como el fácil acceso, los mapas del sitio, la información sobre costos de envío y pensar en facilitar la interacción de los usuarios adultos mayores.
Bolivia aún no cuenta con un reglamento sobre comercio y firma electrónica. Si bien este tema está incluido en la Ley de Telecomunicaciones, aún no hay un desarrollo normativo e institucional sólido.
En la medida en que no se institucionalice la firma electrónica, el comercio electrónico no podrá desarrollarse plenamente, pues es parte sustancial para brindar seguridad jurídica para transacciones económicas.
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