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jueves, 26 de mayo de 2016
Comedores de la Terminal se convierten en cantinas
Los comedores que se encuentran en las cercanías de la Terminal de Buses de Bermejo, desde cierta hora de la tarde empiezan a vender bebidas alcohólicas y se convierten en bares y cantinas, por lo que los dirigentes del barrio Moto Méndez exigen el cierre de estos lugares o mayores control sobre ellos porque ponen en riesgo a la ciudadanía que transita por el lugar.
La presidenta del barrio, Marina Verdún, contó que en una sola cuadra existen cerca de 10 comedores convertidos en lugares para beber y lo más preocupante es que en la siguiente cuadra existe una unidad educativa, los estudiantes para llegar a sus casas a la salida de clases deben de transitar por estas calles que se tornan peligrosas.
Peleas
Señaló que los vecinos que viven en esta zona y los que transitan por el lugar denunciaron que constantemente existen peleas de personas que se encuentran bajo los efectos de las bebidas espirituosas. Recordó que el anterior fin de semana la intendencia Municipal salió a efectuar una inspección y lograron clausurar a varios locales que no cumplen con las normativas municipales.
“Se ha solicitado al intendente y al Alcalde Municipal que se regularicen los permisos, como presidentes de barrio no damos permiso ni ningún certificado para su funcionamiento, el pedido que hicieron ante la intendencia y seguridad Ciudadana. Fueron atendidos, lograron una primera clausura, si incumplen volverán con la segunda y la tercera que es la clausura definitiva”, explicó.
Verdún señaló que estos locales están ubicados en las calles Abaroa, Topáter y Cochabamba y que esos establecimientos son alquilados por gente que se dedica a esas actividades y que lamentablemente no aportan al barrio, que solo traen preocupación para los vecinos y dirigentes de barrio ante el riesgo que corren los estudiantes que transitan por estas vías para llegar a la unidad educativa 8 de Septiembre.
Los dirigentes de barrio, ante esta preocupación, recomendaron a los vecinos no alquilar sus domicilios para este tipo de negocios, pero en algunos casos lo rentan para que funciones como un comedor, pero los convierten en cantinas con una rockola que funciona todo el día y que molesta a todo el vecindario.
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