El restaurant Gustu de La Paz fue incluido en el lugar número 32 de la lista y además fue galardonado como el mejor de Bolivia en su género.
La gala en la que se conocieron a los ganadores fue realizada en Lima, Perú con la participación de reconocidas figuras del mundo de la gastronomía.
La propietaria y principal impulsora de Gustu, la danesa Kamilla Seidler, estuvo presente en el evento que pudo seguirse en línea a través de la cuenta de Twitter del evento @LatinAmericas50
El ganador del premio al mejor restaurante de Latinoamérica se quedó en el Perú, Central de Lima se llevó el trofeo, seguido de Astrid y Gastón, también establecimiento limeño. En tercer lugar quedó D.O.M. de Brasil.
La selección de los restaurantes se hace de la misma forma que se utiliza para otras listas por parte de Restaurant. La región se dividió en cuatro: México y Centroamérica, que incluye el Caribe, Brasil, Latinoamérica del norte y Latinoamérica del sur, división que representa de la manera más justa el panorama culinario latinoamericano. En cada una de ellas opera un jurado integrado por 62 expertos –integrado por críticos gastronómicos, chefs, restauradores y foodies– liderados por un presidente.
El voto es confidencial hasta que se anuncie la lista, los jurados deben votar por 7 restaurantes –al menos 3 debe localizarse fuera de su país de origen e incluso todos–, deben haber comido en ellos en los últimos 18 meses, no pueden votar por sus propios restaurantes si los tuvieran, o por aquellos en los que tienen algún interés financiero, las nominaciones deber ser para los restaurantes no para su propietario o su chef, y los siete votos deben presentarse por orden de preferencia, información que podría utilizarse en casos de empate.
Gustu, un proyecto exitoso
El pasado mes de agosto, El Deber visitó el restaurante Gustu en la ciudad de La Paz. En el lugar conocieron a los dos responsables de lograr el proyecto gastronómico más exitoso de Bolivia, la danesa Kamilla Seidler y el venezolano Michielángelo Cestari. Ellos lograron sacar adelante un restaurante de categoría en la que los ingredientes bolivianos son los principales protagonistas.
Kamilla Seidler no solo crea nuevos platos con productos bolivianos, sino que también viaja a diferentes países a promocionarlos con la finalidad de atraer la atención hacia Gustu y también despertar el interés para luego exportarlos.
En Gustu además funciona una escuela gastronómica en la que se está formando a jóvenes cocineros bolivianos. En el lugar reciben entrenamiento profesional con todas las condiciones necesarias para su capacitación. El objetivo es que la cocina boliviana eleve su nivel.
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