miércoles, 21 de septiembre de 2016

Extrabajadora de Katanas contradice a Nohemy, alude a la Alcaldía y confirma rentabilidad del negocio

Una extrabajadora del club nocturno Katanas, que está en el ojo de la tormenta por una denuncia de trata y tráfico de personas que pesa sobre su propietario, Marco Cámara, salió a la palestra para contradecir la versión de la hija del dueño, Nohemy, en torno al trato hacia las mujeres que trabajaban en el lugar.

En una entrevista con el programa radial Cabildeo, de la periodista Amalia Pando, la extrabajadora, que prefirió mantener su nombre en reserva, también corroboró la visita que hacía gente de la Alcaldía de La Paz al local y confirmó que el negocio es rentable, al grado que por noche es posible ganar hasta 2.500 bolivianos.

A continuación lea la entrevista íntegra de la extrabajadora con el programa radial:

Amalia Pando: Vamos a darle la bienvenida, vamos a ponerle, para facilitar la entrevista, el nombre de Cinthia. ¿Trabajaste en Katanas? ¿Cuánto tiempo o si sigues trabajando?

Cinthia: Hace un año, como un mes, porque allí llegué por medio de un casting, me avisaron que necesitaban chicas, fui y me fijaron horarios cuando me seleccionaron. Como cualquier trabajo, en qué horarios yo podía asistir.

Lo que yo vi es que a nadie nos obligaba. Sí nos obligaban a cumplir los horarios que nosotras mismas nos ponemos. Fuera de eso, durante un mes, tú puedes ir, y hay locales al frente, por todos lados, y puedes ir y trabajar por cualquier lugar.

Y no veo que a las chicas, no existe eso, porque un mismo cliente no puede entrar, un cliente paga por un servicio para que lo atiendan bien, si la chica estaría obligada, el cliente exigiría que le devuelvan la plata, no es que se las obliga, ahora tú trabajas y puedes cobrar 300 bolivianos por servicio, y de los 300, 150 es parta ti y 150 para el dueño o administrador del local y eso es lo que me pone triste, porque ellos ganan sin hacer nada, y ganan la mitad, pero te dan la mitad, y eso te lo dicen cuando entras y eso existe en todos los locales.

¿Cuánto sacabas por noche?

Lo mínimo que llegue a sacar entre semana es de 1.300 a 1.500. Fines de semana sacaba más de 2.000, 2.500 por noche.

Entonces es un trabajado sumamente rentable

Sí, pero lo malo es que el administrador se queda con la mitad. Eso es lo malo.

De esos 2.000, era 1.000 para dueño y 1.000 para vos

Dos mil para mí y otros 2 mil para el dueño.

En tu caso era un trabajo voluntario

Era por necesidad. Claro, a nadie se le obliga a quedarse ahí, ni te andan obligando a que vayas a un departamento, duermas y vuelvas en un horario. Simplemente nos movemos, como en chicas, en patota, pero nadie nos obliga a movernos así.

¿Es posible que exista un trato particular con las extranjeras que hubieran llegado no por su propia voluntad?

Yo he conocido a paraguayas que llegaban y decía que me han dicho que sólo era para acompañar un cliente, a servirse un trago, pero no sexoservidora. Ellas decían al cliente: ‘no, yo solo tomo y no hago servicio’. Y eso sí lo vi, esa diferencia vi, las paraguayas normalmente no hacen servicio, pero no sé si las obligaban, tampoco creo eso mucho.

Pero no tienes certeza

No.

¿Menores de edad que hubieras visto?

No, la verdad no, para nada. Pero sí, eso es verdad que la Alcaldía viene al local, es muy cierto. Los de la Alcaldía venían y al administrador pasaban digamos que por caja, no estoy segura si les darían plata o no, pero es lo más seguro y alertaban que iba a haber batidas, y nos decían cámbiense, váyanse y nosotras nos salíamos a bailar a otro lado, es así, más o menos.

¿Y la relación con la policía?

No la verdad no vi. Claro, cuando venían los de la Alcaldía venían con algún policía, pero no más digamos.

¿No venía el Alto Mando Policial o Militar a extorsionarlos?

La verdad que nunca vi eso, pero sí hay muchos funcionarios de gobierno que vienen a hacerse atender o a tomar o a compartir un rato y se van digamos.

Les queda cerca (risas). ¿Cinthia por qué te fuiste?

Porque la verdad de noche desgasta mucho trabajar y hay muchos locales, he ido averiguando cuando llegué, que trabajan durante el día, entonces conseguí un lugar donde empecé a trabajar por el día y ya no por la noche.

Y sigues con el trabajo

Si y lo malo es que no hay licencias de sexoservidoras, sólo existen licencias de whiskerías, y las dueñas abusan de su local, sólo por ser las dueñas ellas ganan mucho más que nosotras porque ellas ganan de 10 chicas y yo solo gano de mí.

Roxana Lizárraga: En su estadía por Katanas, ¿conoce algún tema del conflicto entre Nohemy Cámara y el señor Marco Cámara?

Yo estaba cerca cuando estábamos compartiendo, también algunos clientes entre chicas, que fue ella al SITRAM para que el club quedara a su nombre, quería sacar una nueva licencia y voy a ir a sacar licencia dijo y fue y en la alcaldía dice que le pidieron los papeles que certifiquen que el Katanas estaba a su nombre y dijo: ‘le voy a pedir a mi papá, pero él no me quiere dar, lo voy a hacer cagar’, así hablaba digamos.

O sea ya había conflicto

Ella siempre se interesó que el local esté a su nombre y estaba en eso desde el año pasado.

El padre no le quiso entregar la documentación

Sí. Quería que la licencia del local estuviera a su nombre y le pidieron papeles de eso y su papá dice que su papá no le quería dar y de eso ella estaba renegando y decía que lo voy a hacer cagar algo así.

La pugna era quedarse con el local, ¿sabes por qué motivo el papá no le quería dar los papeles?

La verdad es que yo nunca vi a su papá en el local, a ella sí, ella trabajaba, pero a su papá no.

Amalia Pando: ¿Ella trabaja cómo?

Tomando. Atendía a clientes, la verdad nunca la vi hacer pieza, pero sí la veía compartir con clientes.

Todo el mundo sabía que era la dueña

Ella quería ser la dueña. La verdad que cuando yo llegué ella decía que yo voy a ser la dueña, quiero que esto sea mío, y después una amiga me comentó, corría el rumor de que ella ya era la dueña.

Gracias Cinthia por este testimonio.

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